Antes del inicio de la Serie Mundial, los Astros de Houston se veían como un claro favorito para ganarlo todo, pero los Nacionales de Washington se encargaron de robarse dos partidos en carretera contra todo pronóstico.

Luego, totalmente contra las cuerdas, los Astros ganaron tres en fila en la capital de la nación para obtener su primera ventaja en la serie y ponerle en punto de jaque para triunfar en condición de local.

No obstante, los capitalinos tendrían la última palabra en el regreso a Texas, obteniendo un contundente triunfo para emparejar las acciones a tres triunfos por bando y forzar el séptimo y definitivo.

En este sentido, esta es la primera oportunidad en la historia de la Serie Mundial en que ningún equipo local ha podido ganar ni un solo partido, dejando siempre a sus aficionados con mal sabor de boca.

De seguir esta tendencia, serán los de Washington los que se consagren esta noche cuando Max Scherzer y Zack Greinke suban a la lomita, pero, de momento, existe pronóstico reservado.