Kevin Durant tuvo una infancia muy dura, como muchos de los atletas que hoy dominan el mundo del deporte. Por eso, su prioridad principal en este punto de su carrera es ganar mucho dinero.
Tras ser campeón con los Golden State Warriors y ganar prácticamente todas las distinciones individuales de la liga, el alero de los Brooklyn Nets sabe que su carrera llegará a su fin más pronto que tarde.
En este sentido, Durant confesó a Forbes que su objetivo a largo plazo en la NBA era ser el propietario y gerente de su propia franquicia para seguir generando dividendos después del retiro:
“Quiero ser el dueño y gerente de un equipo de la NBA. Estar a cargo de las operaciones del día a día y tener un impacto en los jugadores jóvenes que llegan a la liga. Empecé muy abajo y sé que habrá niños en mi familia y que empiecen arriba del techo. La única forma de llegar ahí con tu familia es creando dinero, y quiero hacerlo de una forma más cool, no simplemente de forma avariciosa acumulando lo más que pueda”, declaró Durant.
Ciertamente, con la cantidad de dinero que Durant ha amasado a lo largo de su carrera dentro y fuera de la NBA, tiene capital más que suficiente para invertir en su propia franquicia una vez le diga adiós a las canchas.
Además, si alguien conoce las viscicitudes y pormenores de llevar las operaciones de una franquicia, así como lo que necesita un atleta llegando a la liga, es un jugador. ¿Logrará su sueño?