Tras jugar un muy mal partido, el brasileño fue expulsado por un pelotazo a Armero y un cabezazo a Murillo. Recibió la roja directa y si le dan dos fechas, reaparecería en semifinales.
Tras el apasionante espectáculo futbolístico que brindaron Brasil y Colombia, el escándalo se hizo presente en el final con el partido ya terminado. Las caras de impotencia y nerviosismo en los protagonistas brasileños no se podían esconder, siendo Neymar el más fastidioso con la situación. Precisamente por él se generó la trifulca en el cierre.
Los últimos dos partidos que no jugó Neymar, Brasil recibió 10 goles y anotó 1.
Es que el chileno Enrique Osses marcó el final del juego justo cuando la ‘Verdeamarelha’ intentaba cerrar un ataque y ‘Ney’, en un ataque de impotencia, lanzó la pelota sin percibir que fue directo al cuerpo de Armero. Esto ocasionó que todos los colombianos se le fueran al humo, por lo que el capitán de la ‘Canarinha’ no tuvo mejor idea que reaccionar con un cabezazo a Murillo. Allí fue entonces que apareció Bacca increpándolo con un fuerte empujón.
Luego de una trifulca insostenible, el juez le mostró la roja a Neymar cuando abandonaba la cancha (ya había alcanzado su segunda amarilla en el torneo por lo que no iba a poder estar ante Venezuela) y enseguida hizo lo propio con Bacca. Lamentable…
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