El primer periplo de Dwight Howard con los Lakers no terminó nada bien. Después de que la franquicia se arriesgara en un traspaso, los abandonó después de un año con muchos problemas, indisciplina y falta de compromiso.
Es por eso que para muchos fue una sorpresa ver que la franquicia angelina aceptara traerlo de vuelta este verano, después de que DeMarcus Cousins sufriera una terrible lesión de rodilla que lo dejará fuera toda la campaña.
De acuerdo con el reporte de Adrian Wojnarowski, Howard llegó al entrenamiento en excelente condición física y con una actitud humilde tras haber tocado fondo. No obstante, el equipo le advirtió que no quería distracciones de su parte y que no tolerarán sus desatinos.
Howard es uno de los pívots más talentosos de todos los tiempos y un jugador sumamente dominante en ambos costados de la cancha, pero su falta de disciplina y compromiso lo llevaron a pasar sin pena ni gloria los últimos años de su carrera.
Ahora, está llamado a dar un paso al frente y redimirse, y tendrá la oportunidad de volver a competir por un campeonato con una de las franquicias más reconocidas del mundo del deporte, algo que no sucede muchas veces.
Howard deberá aportar sus dotes como reboteador y defensa desde el banquillo para los angelinos, pero si se muestra comprometido y centrado, es probable que incluso termine siendo el centro titular de los de púrpura y dorado.