En una de las noticias más sorpresivas de la última jornada en la Major League Baseball (MLB), el primera base dominicano Albert Pujols fue despedido por Los Angeles Angels tras nueve temporadas, y en medio de su último año de contrato.

Pues bien, desde la franquicia de California han entregado las razones por las cuales decidieron desprenderse de los servicios del pelotero de 41 años, quien ahora se debate entre el retiro de la actividad y regresar a St. Louis Cardinals, y tiene que ver con el asunto deportivo.

Así, al menos lo explicó el gerente general de los Angels, Perry Minasian, que dialogó con ESPN y junto con admitir que "fue muy difícil" dar de baja a Pujols, explicó que "nunca es el momento perfecto para hacer algo así. Esto se debe a que él quería más tiempo de juego y Albert no es un jugador de la banca".

Corrieron a Pujols por querer jugar más
 

Estas palabras se unen a las del presidente del cuadro angelino, John Carpino, quien tras conocerse la noticia explicó que "las cosas nunca terminan como quisieras, pero lo manejó como un profesional", añadiendo que "tú siempre quieres que un jugador tenga una última despedida, algo, y Albert dejó esta decisión en nuestras manos y la tomamos a partir de allí".  

En ese sentido, el directivo de los Angels aclaró sobre el futuro de Pujols que "Albert está decidido a seguir jugando, así que era difícil hacer eso; si consigue algo con otro equipo y el equipo viene para acá o nos vemos en la ruta o algo, es posible que podamos hacerlo".

¿Cuál será el próximo paso de Pujols?
 

Hasta el momento, el dominicano no se ha expresado en sus canales de redes sociales respecto de su salida de la escuadra californiana; sin embargo, se espera que trate de firmar con otra franquicia en los próximos días, a través de un pase por waivers.

Mientras tanto, el plan de los Angels para lo que resta de temporada en MLB, es que el puesto de primera base lo ocupe el joven talento Jared Walsh, mientras que el bateador designado sea el japonés Shohei Ohtani; por su parte, Pujols preservará su contrato por servicios personales de 10 años y $10 millones de dólares y será ejercido cuando se retire.