Dorados cayó ayer frente a Zacatepec, por la cuarta jornada del grupo C de la Copa MX, en el Estadio Agustín Coruco Díaz.
Además de la bronca por cómo perdió el cuadro de Sinaloa (el único tanto del partido llegó a los 90 minutos y mediante una carambola), Diego Maradonahizo una dura denuncia por una situación que vivió en el encuentro.
“Me aventaron una botella que pasó cerca de mi hombro. No puedo creer que un energúmeno pueda agarrar una botella, tirarla a la cabeza e irse sin castigo. Esto va más allá del fútbol.Hago un llamado a las autoridades para no sufrir otro incidente como este”, declaró el entrenador.
Ahora, los encargadosdeberán comprobar lo sucedido y, de ser cierto, sancionar a los agresores.