Damian Lillard es un tipo de pocas palabras que prefiere que su desempeño en el tabloncillo hable por sí mismo, pero siempre ha dejado claro que quiere demostrar que merece más respeto del que recibe.

En este sentido, ni siquiera tuvo que hablar para poner el último clavo en el ataúd de Russell Westbrook y el Oklahoma City Thunder, después de eliminarlos con un triple mortal en el juego 5 de la serie de primera ronda.

Un posteo en Instagram le bastó a Lillard para demostrar que el que ríe de último ríe mejor, y que no es necesario hablar tanto para salir airoso frente a tus rivales:

"El que vence es el guerrero desapegado, reservado y que no se deja dominar por sus emociones, no el exaltado que busca venganza ni el ambicioso que busca fortuna".

Evidentemente, este posteo hizo alusión a Russell Westbrook y los jugadores del Thunder, que pasaron toda la ronda de playoffs vociferando y tratando de implicarse en disputas con los Blazers y no pudieron respaldarlo en la cancha.

Ahora, Lillard continuará su gesta en los playoffs recibiendo al vencedor de la serie entre San Antonio Spurs y Denver Nuggets, mientras que Westbrook tendrá que conformarse con ver las Finales desde la comodidad de su hogar.