A pesar de afirmar que 'se siente fantático' y que de no estar al 100% no regresaría al tabloncillo, parece que los Lakers no están completamente convencidos del estado físico de LeBron James.

El veterano de 16 temporadas es conocido por su durabilidad, salud y disciplina para cuidar de su cuerpo, sin embargo, no se puede ignorar el hecho de que ya tiene 34 años de edad.

Asimismo, esta temporada experimentó lo que fue su lesión más duradera en la historia, llegando a perderse 18 compromisos para sumir a su equipo en una crisis.

Cuando ha estado disponible, James ha estado muy por encima de su nivel habitual, promediando números de MVP.

Sin embargo, actualmente los Lakers ocupan la 10ma posición de la Conferencia Oeste, por lo cual necesitan a un James más atinado que nunca si aspiran a llegar a la postemporada.

Asimismo, sería sumamente preocupante para los Lakers no conseguir los resultados y además arriesgar la salud de su máxima figura, por lo que se especula que incluso pudieran clausurarlo por el resto de la campaña si el equipo no levanta cabeza.