Quienes hayan practicado fútbol alguna vez, saben que las posibilidades de llegar a consagrarse con la Primera División son un premio que algunos pocos consiguen.
Uno de esos afortunados es Juan Manuel Trejo, quien debutó en Independiente en 2012 y le perteneció al club de Avellaneda hasta el año pasado.
Trejo marca a Acosta en un Independiente – Estudiantes. (Getty)
En 2018, el lateral quedó libre con apenas 26 años tras una cesión en Quilmes y, después de una prueba en Nueva Chicago y una serie de lesiones, no volvió a jugar al fútbol.
Ayer volvimos a escuchar su nombre gracias a un tweet del usuario @ivaanpuga, quien publicó en la red social que su hermana se había subido a un coche de Uber manejado por el defensor.
“Mi hermana se pidió un Uber y vino JUAN MANUEL TREJO. No hay remate”, adjuntó junto a una imagen en la que se puede ver la (buena) calificación del joven en la aplicación.
Un sinfin de respuestas se acoplaron al tweet. La gran parte de ellas, repletas de reproches hacia el usuario, quien pareció burlarse del nuevo oficio del Tucu.
En diálogo conRojos de Pasión,Trejo explicó su situación y aclaró (como si tuviera la obligación dehacerlo) el porque decidió utilizar su coche para transportar pasajeros.
“Necesito laburar. Me toca mantener a mi familia y a mi mamá. Trato de que no les falte nada. Tuve que pagar el velatorio de mi papá que falleció hace 4 meses. Nada fue fácil. Le prometí a mí papá que iba a volver a jugar al fútbol y estoy convencido de que lo voy a cumplir”.
DesdeBolavip,le mandamos un fuerte abrazo a este luchador y le deseamos la mayor de las suertes en su búsqueda por volver a hacer lo que más lo hace feliz.
Trejo sueña con volver a jugar al fútbol profesionalmente.