La mayoría de los niños pidieron juguetes a los reyes Magos, pero no fue el caso de Julio Gamero, un aficionado del Pachuca que les pidió un tatuaje, el cual se hizo en el pecho.
(Foto: Univisión Deportes)
Julio César Gamero Ortíz es hijo de Julio Paredes, quien presumió en Facebook lo valiente que fue su hijo al aguantar el dolor de la aguja que lo marcaría de por vida.
Los colores se llevan en la piel, sin importar desde cuando...
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