Rob Gronkowski les rompió el corazón a las decenas de miles de fanáticos de los New England Patriots, anunciando su retiro poco después de haberse consagrado en la última edición del Superbowl.

Desde ese momento, la afición de los Patriots ha tratado por todos los medios de convencer al mítico ala cerrada de reconsiderar su decisión y volver al emparrillado, una idea con la que ha coqueteado entre bromas en más de una ocasión.

Es por eso que la 'Patriot Nation' enloqueció por completo cuando se reveló que 'Gronk' había entrenado en privado nada más y nada menos que con Tom Brady, recibiendo pases del legendario mariscal de campo en el campus de UCLA.

Gronkowski ya había desmentido la posibilidad de un regreso al emparrillado esta próxima campaña, pero desde su entorno se ha esparcido el rumor de que podría reconsiderarlo si los Patriots lo necesitan de cara a la postemporada.

No obstante, las últimas imágenes del ala cerrada demuestran que su condición física dista mucho de lo que era en sus tiempos de jugador, pues se encuentra mucho más delgado y menos musculoso en el retiro.