Si hay un lugar donde las tradiciones se respetan es precisamente en los predios de los Yankees de Nueva York,una institución que ha tratado de conservar una imagen a lo largo de su historia.

En este sentido, la familia Steinbrenner estableció en 1973 un estatuto que rige que sus peloteros no podrían utilizar vello facial - a excepción de bigote - y una cabellera larga para darle una imagen seria y corporativa a la organización.

"Todos los jugadores, entrenadores y ejecutivos masculino están prohibidos de usar cualquier vello facial más que bigotes y el cabello no debe de crecer más allá del collar. Las patillas no están específicamente prohibidas", reza la regla impuesta en el código de la institución.

A lo largo de la historia, los peloteros han cumplido con esta regla a cabalidad pues, más allá de las sanciones en las que pudieran incurrir, se veía simplemente como el respeto a una tradición y un honor inherente a jugar para una franquicia tan importante como esta.

No obstante, una nueva determinación judicial del Estado de Nueva York haría que este estatuto interno del equipo pasara a ser ilegal, pues de ahora en más se prohibiría la discriminación laboral por vestimenta religiosa o vello facial.

Evidentemente, esta decisión apuntan a respaldar a las minorías en la ciudad y no serían un atentado directo a los Yankees, pero podría ponerle punto y final a una de las tradiciones más importantes de las Grandes Ligas.