El carácter, siempre tan útil cuando se sabe canalizar, podría jugarle una mala pasada a Pablo Pérez de cara a la primera de las dos finales que disputarán Boca y River para definir quién será el nuevo campeón de la Copa Libertadores.

Es que el capitán del Xeneize no pudo iniciar la semana previa al Superclásico en La Bombonera entrenándose con normalidad y el motivo es de lo más extraño.

Pérez no ha podido recuperarse todavía del golpe que con su pie derecho le dio al poste tras fallar un gol en el partido ante Rosario Central, hace casi tres semanas atrás.

Y si bien es cierto que tras ese encuentro fue titular ante Palmeiras en Brasil, lo cierto es que se habría resentido de su dolencia por lo que el cuerpo médico le recomendó trabajar diferenciado.