Desde que se conocieron los clasificados, absolutamente nadie en el globo terráqueo piensa en otra cosa que no sea la histórica e inolvidable final de la Copa Libertadores de América entre Boca Juniors y River Plate.

Sin embargo, desde hace algunos días, los servicios meteorológicos venían anunciando tormentas para este sábado en Buenos Aires. Y, a diferencia de otras veces, acertaron y se cae el mundo abajo en la capital argentina.

 

Fuertes tormentas azotan a la zona de la Bombonera y sus alrededores. Si bien por momentos la lluvia se detiene y el agua drena, lo cierto es que el panorama no luce del todo alentador, al menos en el corto plazo.

Por otra parte, cabe destacar que el estadio de Boca Juniors posee un buen drenaje, por lo que ese es un punto a favor teniendo en cuenta que, si para de llover, el campo de juego no necesitaría tanto tiempo para volver a estar en condiciones.

Otro factor a tener en cuenta será el relacionado con las descargas eléctricas. Si existen las mismas, la disputa del Superclásico no podría llevarse a cabo y debería reprogramarse casi con seguridad.

Lo cierto es que, si continúa lloviendo hasta las 12 horas, la Conmebol, que hará una nueva revisión en ese momento, tomaría la decisión de suspender el partido. En ese caso, instantes después se conocerían los detalles del nuevo día y horario del encuentro.