Héctor Herrera pasa por uno de los mejores momentos de su carrera. Quizás no está mostrando su nivel futbolístico más alto, pero tiene su lugar ganado en uno de los equipos más importantes de Europa: Atlético de Madrid.
Sin embargo, al mediocampista le costó mucho llegar a donde está hoy en día. En una entrevista para el diario español Marca, confesó algo inédito: el día que casi cuelga los botines y se retira del futbol.
El Zorro pasó el momento más complicado de su carrera en Tampico Madero, donde estuvo cedido por el Pachuca.
“En algún momento el Pachuca me prestó a Segunda División, fui a jugar seis meses a Tampico Madero, pero no nos pagaban, no teníamos nada y yo ya vivía con la que hoy es mi esposa”, señaló.
Más delante explicó: “Ella quedó embarazada y ahí, en esa situación, pensaba en dejar el futbol y ponerme a trabajar porque tenía obligaciones y deberes y yo no sabía qué futuro iba a tener. Entonces sí lo pensé un poco y como mi padre trabajaba en Estados Unidos pensé en irme con él y en que todo iría bien”.
“Al final dentro de mí me decía que no, que tenía que esperar, que llegaría una oportunidad y que la tenía que aprovechar. Esperé un poco más y por suerte surgió esa oportunidad de quedarme en Pachuca y jugar en Primera”, subrayó el Colchonero.