La nueva eliminación de Boca ante River en la Copa Libertadores dejó tambaleando al club de La Ribera.
Luego de la victoria -que no sirvió de mucho- ante el campeón de América, Gustavo Alfaro dio una conferencia de prensa en la que pareció estar decidido a dejar el xeneizea fin de año.
“Lo que quiero es irme a mi casa y recuperar mi vida”, pronunció el entrenador. Una frase que retumbó fuerte en los oídos del mánager Nicolás Burdisso y que parece marcar un final anunciado.
Ahora, el Diario Olé confirmó lo que se esperaba: el entrenador no seguirá en el cargo sea cual sea el resultado de las elecciones de diciembre.
“Cumplirá su contrato, sí.Pero diciembre será el final que ya se planteó para un año súper intenso, en el que sintió (como le pasa a todos los técnicos, sean o no de la casa) el desgaste que provoca el Mundo Boca”, apuntan desde el medio argentino.
Será el cierre de una etapa de transición para el conjuntoazul y oro,que decidió apostar a un técnico de experiencia que apostó a cerrar su exitosa carrera en uno de los clubes más grandes del mundo.