La selección ecuatoriana volverá a formar parte de un Mundial de fútbol, tras no lograr clasificarse a Rusia 2018. Un equipo sólido, ordenado y que sabe a lo que juega de la mano del argentino Gustavo Alfaro. Su principal objetivo será superar por primera vez los octavos de final.
Desde el Mundial de Corea del Sur y Japón 2002 se han clasificado a tres mundiales (2002, 2006 y 2014). Lo más lejos que llegaron fue octavos de final, en Alemania 2006 y su gran aspiración es meterse en cuartos. Tienen un grupo muy parejo en el que puede suceder cualquier cosa.
Grupo parejo:
¿Por qué no?:
El sorteo realizado el 1 de abril en Doha lanzó a Ecuador en el Grupo A. La zona del local. Es más, los ecuatorianos jugarán el partido inaugural el 20 de noviembre contra los anfitriones. Los otros dos equipos son Senegal y Países Bajos. Los europeos parten como candidatos, pero los africanos y los ecuatorianos son parejos. Si Ecuador le hace un buen partido a los neerlandeses y hace su deber contra los otros dos, puede clasificarse tranquilamente.
Si pasa a octavos:
¿Qué le puede tocar?:
Si se da una combinación, Ecuador puede tener un cruce favorable en los octavos de final. En caso de que los ecuatorianos salgan segundos y los ingleses del Grupo B primeros jugarán contra ellos. Pero si Ecuador gana su zona e Inglaterra también, los sudamericanos se cruzarían con Estados Unidos, Irán o Gales.
Puede ilusionarse:
Los jóvenes, los artífices del sueño:
Los ecuatorianos hicieron una gran Eliminatoria sudamericana. Finalizaron cuartos y ya estaban clasificados al Mundial con una fecha de anticipación. Arriban al Mundial con un equipo joven y con varios jugadores en Europa. Como Pervis Estupiñán o Piero Hincapié. Su gran figura es el delantero del Fenerbahce Enner Valencia.