El futuro de Lionel Messi sigue en el aire, con su padre Jorge esperando por el llamado de PSG y con Barcelona declarando públicamente el deseo por verle de nuevo en el Camp Nou. Del otro lado del mar y consientes de sus opciones, la MLS no se pierde ningún detalle de una trama donde para convencer al argentino, todos tendrán que pagar por sus servicios.
Fabrizio Romano desvelaba anoche en su canal de YouTube como de momento nadie en Cataluña ha enviado una oferta formal para buscar el retorno del Rey, así como que Messi pide garantías deportivas al PSG en caso de que estos quieran seguir pujando por sus servicios. Que Leo sea agente libre ayuda a quienes no pueden pagar un traspaso para buscar su fichaje, pero las diferencias salarias que existen entre el viejo y nuevo mundo llevan a operaciones desconocidas hasta aquí que muestran el camino que tendrá que seguir la MLS.
Estados Unidos y Arabia Saudita componen los exóticos destinos que también entran en esta trama donde Leo será el único dueño de su futuro y donde el dinero no es todo a la hora de elegir un nuevo paso en esa carrera que consagrarse todo por Qatar 2022. Se buscan proyectos competitivos, estabilidad y por supuesto, poder seguir dándole prioridad a una selección Argentina que seguirá contando con su capitán a corto plazo. Por la MLS nadie se rinde de momento.
Todos tendrán que pagar
Sport afirma que en Estados Unidos ningún club podrá pagar por su cuenta el salario que recibe Messi en Europa, así como ni siquiera uno que se disminuya en relación a lo que cobra el argentino por el Parque de Los Príncipes. Siguiendo la línea de esas informaciones que apuntan a darle libertad a Leo de crear en un futuro su propio equipo por la MLS, en la Mayor League Soccer asumen que para que todo llegue a buen puerto, cada franquicia tendrá que colaborar.
Un jugador de élite en la MLS cobra alrededor de seis millones de euros, cifras mínimas para lo que percibe o genera La Pulga en Europa. Es ahí donde los propietarios del soccer ven una oportunidad y donde Sport informa que cada club de la liga norteamericana pagará por tener a Messi en el torneo. En esta ecuación se le daría libertad absoluta al zurdo de elegir su destino entre Miami, Los Ángeles o Nueva York.
Una medida que puede parecer polémica, pero que basa sus fundamentos en lo que supondría para cada club tener a Lionel Andrés en la MLS. Los derechos de TV se dispararían, las entradas también y por supuesto que el merchandising generado alrededor del fichaje más importante de los Estados Unidos iría a niveles desconocidos. Que cada una de las 29 franquicias aporte dinero en el arribo de Messi, única fórmula para justificar su salario ante los entes de control del torneo.