Tan buena es para Boca la oferta del Porto para llevarse a Alan Varela, desenlace que se espera tenga lugar pronto, que ni siquiera se preocuparon demasiado en poner como condición al club portugués que el mediocampista pueda quedarse a disputar la serie de octavos de final de la Copa Libertadores ante Nacional ante4s de irse.
Los 12 millones de dólares más una plusvalía del 20 por ciento por una futura venta no solo representará la mejor operación de la gestión Juan Román Riquelme en materia de traspasos, sino que además se dará por un jugador que no es imprescindible para Jorge Almirón.
Esto último empezó a quedar claro después que el entrenador pidiera quedarse con Jorman Campuzano a la vuelta de su préstamo en el fútbol turco y es precisamente el colombiano quien está llamado a ocupar su lugar en la nómina de futbolistas habilitados para disputar la Libertadores.
Se cree, incluso, que Boca no recurriría al dinero de esa venta para buscar en el mercado de fichajes a otro jugador en esa posición, sino más bien a cubrir otras necesidades prioritarias para el DT como podría ser la llegada de un defensor central.
De los cinco lugares que Boca puede ocupar en la nueva nómina de la Copa Libertadores, tres ya estarían reservados a Campuzano, Janson y Blondel. Y hay tres frentes abiertos de los cuales debería descartarse uno, entre un posible arribo de Cavani, la llegada de otro zaguero y un mediocampista ofensivo.