A Boca le es esquiva la Copa Libertadores desde el año 2007. En aquella oportunidad, con Miguel Ángel Russo en el banco de suplentes y Juan Román Riquelme brillando en la cancha, el Xeneize conquistó su sexto título y quedó a tiro de Independiente, que tiene siete. Desde entonces disputó tres finales y no pudo ganar ninguna. La de 2012 tuvo la particularidad que los escándalos del vestuario jugaron en contra y, aparentemente, fueron determinantes para caer ante un Corinthians que jugó muy bien las dos finales.
Tras dejar en el camino a Unión Española en octavos, a Fluminense en cuartos y a la U de Chile en semifinales, Boca arribó a la final y allí se iba a medir ante Corinthians. La ida se disputó en La Bombonera y quedó 1 a 1: Roncaglia abrió el marcador para el Xeneize, pero Romarinho estableció el empate a falta de cinco minutos para el cierre. En la previa de la revancha hubo dos acontecimientos que afectaron al grupo. El primero de ellos fue el conflicto que tuvo Facundo Roncaglia con la dirigencia y el segundo y más importante fue que se filtró que Juan Román Riquelme se iría del club.
El día previo a la final, Sebastián Riquelme -hermano menor de Juan Román que por ese entonces tenía 16 años- realizó una publicación en Twitter, cuando esta red social no era tan masiva como lo es hoy en día y escribió: “La bomba que se viene mañana en Brasil ni se imaginan, se mueren”. Finalmente, Román terminó dejando el club luego de aquel encuentro de vuelta ante Corinthians que quedó en manos de los brasileños por 2 a 0.
Falcioni habló de aquella famosa final
En diálogo con Dupla Técnica, Julio César Falcioni recordó la final entre Boca y Corinthians: “Estuvimos en la puerta, llegamos a la final. Empatamos de local pero lo merecimos ganar y después perdimos en San Pablo. Pasaron cosas que no tendrían que haber pasado previo a una final. La noche anterior al viaje estábamos concentrados y ahí me enteré que Roncaglia no iba a jugar porque no se habían puesto de acuerdo con el seguro que tenía que poner Boca”.
“El grupo tuvo una reunión para que Roncaglia esté por lo menos acompañando al grupo y el club lo aceptó. Esa ´comunión´ era anormal previo a una final y después sucedió lo del hermano de Riquelme. Esas pequeñas cosas o no tan pequeñas desenfocaron la situación”, completó Falcioni.
