La novela del verano en Boca suma un nuevo capítulo. Cuando parecía que lo único que parecía era la firma, la transferencia de Marino Hinestroza desde Atlético Nacional se sumergió en un pantano del que todavía no hay salida. Al punto de generarse un limbo por condiciones que mutaron sobre la marcha y que pusieron en pausa el desembarco del primer refuerzo para 2026.
La ansiedad que origina el mercado de pases, sumado a la del propio jugador, que llegó a publicar un sugestivo reloj de arena junto a corazones azul y amarillo en redes, hicieron creer que se presentaría en la pretemporada el 2 de enero. Sin embargo, apareció una inesperada disputa de escritorio entre el Xeneize y Atlético Nacional.
Según pudo saber Bolavip, la buena predisposición de Boca fue puesta a prueba en dos oportunidades. La primera charla giró en torno a una cifra de 4,5 millones de dólares. Desde Brandsen 805 dieron el visto bueno. Acto seguido, desde Medellín ajustaron el número y pidieron 5 millones. Boca volvió a aceptar y se estiró hasta esa cifra para cerrar al extremo. Pero faltaba un capítulo más.
El punto de discordia
La traba actual radica en detalles de letra chica: Atlético Nacional ahora solicita quedarse con un porcentaje de una futura venta y el porcentaje que cederá del pase del jugador. El pedido descolocó a la dirigencia Xeneize, ya que en ninguna de las charlas previas se había mencionado la inclusión de una plusvalía o un porcentaje a futuro.
Estos asteriscos de último momento son la principal razón que impiden el acuerdo total por Hinestroza. De todas formas, el optimismo persiste en Boca y creen que alcanzarán un acuerdo para que la transferencia se termine concretando. Mientras tanto, el extremo colombiano aguarda por el visto bueno para emprender su vuelo rumbo a Buenos Aires.
El contrapunto desmentido
Vale recordar que, antes de que se revelara este nuevo aspecto en las negociaciones entre los clubes, las especulaciones sobre la demora apuntaban hacia otro lado. Es que se rumoreaba que Atlético Nacional mantenía una deuda salarial con el extremo, lo que frenaba su salida.
Sin embargo, esa teoría fue descartada de plano por el propio club de Medellín. A través de un comunicado oficial reciente, la institución aseguró actuar con “absoluto rigor” en sus obligaciones y negó tener pagos pendientes con sus futbolistas. Despejada la duda sobre el conflicto salarial, quedó en evidencia que el obstáculo no es más que una puja que se endureció en las últimas horas.
Datos clave
- Boca aceptó pagar 5 millones de dólares por Marino Hinestroza tras subir la oferta inicial.
- Atlético Nacional frenó el pase al exigir a último momento un porcentaje de venta futura.
- El club colombiano negó oficialmente tener deudas salariales que impidan la transferencia.
