Boca Juniors busca entrenador. Desde la dirigencia han dejado entrever que después de la salida de Diego Martínez, el ciclo de Mariano Herrón será apenas un interinato hasta que el nuevo director técnico asuma las riendas del equipo en lo que queda de la temporada y durante el próximo año. En este contexto, los dos nombres más fuertes que están en carrera son los de Guillermo Barros Schelotto y Fernando Gago.

El periodista Tati Civiello reveló detalles de una conversación que tuvo con Guillermo. Actualmente, el ex entrenador de la selección de Paraguay está libre y espera por alguna oferta que lo seduzca.

Ante la consulta sobre si volvería al fútbol argentino, el Mellizo le dejó en claro que solamente “por Boca”. Es decir, que si Juan Román Riquelme lo llama, él lo atenderá y escuchará la oferta para volver a ponerse el buzo de DT.

Además, en esa misma charla, aclaró que es falso que no puede salir de los Estados Unidos, en donde vive actualmente, mientras tramita la ciudadanía. Por lo que, de llegar a un acuerdo, podría asumir lo más pronto posible.

¿Cómo le fue a Guillermo Barros Schelotto como técnico de Boca?

Barros Schelotto dirigió a Boca Juniors desde marzo de 2016 hasta diciembre de 2018, completando un total de 117 partidos oficiales (65 triunfos, 29 empates y 23 derrotas), con un promedio de 1.91 puntos por partido​. Bajo su mando, el equipo ganó dos títulos de liga consecutivos, logrando imponerse en los Campeonatos de Primera División 2016-17 y 2017-18​.

Fernando Gago aparece en el radar

Por su parte, Fernando Gago trabaja en Chivas de Guadalajara y, si bien su presente no es el ideal, hay una cláusula en su contrato que podría dificultar las cosas.

El contrato de Fernando Gago con Chivas de Guadalajara tiene duración hasta fin de año y hay un apartado que indica que podría ser extendido por un año más, aunque todo indica que no será así ya que el presente del equipo no es el mejor en México. Pero un detalle para nada menor es que, según informó ESPN, si Boca quiere sacar a Pintita del gigante mexicano deberá desembolsar unos 2 millones de dólares, una suma más que importante para un equipo del fútbol argentino.