Hace un par de semanas, Lautaro Acosta fue denunciado en las redes sociales por su pareja Ludmila Isabella por violencia de género, algo que ya había sucedido en 2019. En esta ocasión, también decidió presentarse en la Justicia de Lomas de Zamora. Luego de tomar conocimiento de la situación, Lanús decidió licenciar al futbolista, separándolo del primer equipo.
Sin embargo, a inicios de semana se supo por medio del abogado del delantero que las partes habían llegado a un acuerdo de conciliación, algo que ratificaría la denunciante en sus redes sociales con una explicación que dejó expuesto un contexto muy incómodo para ella.
“Pido empatía sobre todo por respeto a todas las mujeres que pasamos momentos feos y traumáticos. Cuando hay hijos de por medio hay decisiones que se tornan difíciles de tomar. En la última declaración que tuve en el Juzgado N° 10 de Familia, me sugirieron que piense en el futuro de mi hijo, porque si seguía con el proceso penal, Benicio corría el riesgo de quedarse sin alimentos futuros”, expresó.
Más allá de las razones que llevaron a Ludmila Isabella a tomar esta decisión, que de ningún modo eximen de responsabilidad a Lautaro Acosta, Lanús hizo público un radical cambio de postura respecto a su situación dentro del plantel, apoyándose en ese “acuerdo conciliatorio” entre las partes.
“El Club Atlético Lanús informa que con motivo del acuerdo conciliatorio entre las partes involucradas en el caso, Lautaro Germán Acosta finaliza su periodo de licencia quedando a disposición del cuerpo técnico“, se puede leer en el comunicado que el club hizo público ayer en sus redes sociales oficiales.
Más allá de esta decisión que desde ya genera opiniones encontradas, Lanús expresó que ratifica su “compromiso en materia de género” y que continúa a disposición de la Justicia.