Por la primera jornada de la Copa LPF, Independiente recibió a Colón en un claro duelo de necesitados. Con vistas a poder afrontar un semestre en el que puedan escaparle al fantasma del descenso, y tras un flojo mercado de pases, trataron de brindar un buen espectáculo en Avellaneda.
Con el regreso de Federico Mancuello, que volvió a su casa para colaborar con la difícil situación después de interrumpir su vínculo en Puebla, los dirigidos por Ricardo Zielinski intentaron ser protagonistas ante un Sabalero que contó con una amplia renovación en el plantel.
A pesar de que en la primera parte se repartieron algunas situaciones de peligro, la ineficacia se hizo presente y ninguno de los dos equipos pudo lastimar en el área contraria. Y fue algo que tanto Zielinski como Néstor Gorosito buscaron modificar para el complemento.
La etapa final fue totalmente diferente al primer acto, y el encuentro tomó otro color. Y si bien Colón creció con el correr de los minutos, obligando a que Independiente debiera defenderse obligatoriamente. De tanto que insistió el cuadro santafesino, obtuvo una situación inmejorable: un penal a su favor 23 minutos.
Después de que Ramón Ábila le quitara la pelota a Facundo Garcés, el ex Boca se hizo cargo de la pena máxima, pero malogró su chance: picó la pelota y la estrelló en el travesaño. Inmediatamente, el Rojo tuvo la contra para poder abrir el marcador, pero la definición no estuvo de su lado, por lo que el remate terminó yéndose por encima del arco.
Cuando todo parecía que iba a terminar con una igualdad, y sin goles, la visita aprovechó a implementar una jugada de laboratorio para que Alberto Espínola termine golpeando al balón con una semi tijera dentro del área y que todo el pueblo santafesino estallara en un grito de gol.
Automáticamente, los hinchas de Independiente comenzaron a reprochar a los futbolistas con silbidos, pero también le mostraron su descontento a Zielinski, a quien insultaron después del tanto de Espínola. Sin duda alguna, se viene un semestre complicado para el Rojo, que está a tres unidades del descenso directo.
En la próxima jornada, los de Avellaneda volverán a ser locales, pero en este caso frente a Vélez, el domingo 27 de agosto. Por su parte, los de Santa Fe recibirán a Gimnasia y Esgrima de La Plata, pero el viernes 25.