Valentín Gómez continúa entrenándose en Vélez expectante por conocer qué será de su futuro, con el City Group en plenas negociaciones por hacerse de su ficha y una primera oferta que no habría cubierto las expectativas del club, por no incluir ninguna plusvalía por venta futura, pero que se espera sea mejorada.

Con tan solo 21 años, el defensor ya supo liderar al equipo en tiempos de apremio e hizo que Boca y River, los dos equipos más importantes del fútbol argentino, se peleen por él. Con la Selección Argentina Sub 20, disputó el año pasado Sudamericano y Mundial, para confirmar que está llamado a ser parte importante del futuro Albiceleste, incluso de tomar la posta de otro zaguero forjado en Liniers que está próximo a despedirse como Nicolás Otamendi.

Parte fundamental del inicio de la auspiciosa carrera futbolística de Valentín Gómez fue Héctor Almandoz, campeón mundial con Vélez en 1994, exentrenador de la Reserva y amigó de su papá Fernando. En diálogo exclusivo con Bolavip, Cohio contó cómo fue que convenció a su familia de que el club de sus amores era el ideal para su formación. Hoy, desde Chile, asume con satisfacción que dio en la tecla.

“Valentín es como mi hijo varón. Con su papá tenemos una amistad de hace muchos años. Yo hice lo que tenía que hacer, que fue meterlo en el mejor club de la Argentina como es Vélez Sarsfield. Sabía que lo iban a preparar, a mentalizar, que se iba a poder foguear y que además lo iban a cuidar”, expresó el actual entrenador de Curicó Unido.

Héctor Almandoz fue el impulsor de la llegada de Valentín Gómez a Vélez.

El defensor nacido en San Miguel llegó al club de Liniers en 2013, con Almandoz trabajando como asistente técnico de Ricardo Gareca y Turu Flores en el plantel de Primera División. Especialista en trabajar con juveniles, Cohio no tardó en confirmar que el pibe iba a llegar, porque llevaba consigo el plus de personalidad y humildad que iba a necesitar para abrirse camino.

“Es muy apasionado. Destaca como futbolista, pero también por la clase de persona, de futbolista que es hoy. Estoy contento por él y por su familia, porque son todos gente de fútbol, enfermos como yo. Siente el fútbol como lo siento yo. Que lo quieran River, Boca, que lo quiera el City Group, es una alegría muy grande. Hablo mucho con el papá, con él y te das cuenta que tiene los pies sobre la tierra. Es un chico muy humilde, que ha crecido muchísimo. Yo simplemente lo lleve a mi casa, que es el Club Atlético Vélez Sarsfield. Después fue todo mérito de él y de su familia”, destacó Almandoz.

La comparación con Otamendi

Cohio Almandoz vio convertirse en profesionales a muchos jóvenes de gran talento en Vélez, pero cuando se trata de un futbolista que comparte la posición que él mismo supo defender en los años más gloriosos de la historia del club siente un cosquilleo especial. Lo siente con Valentín Gómez, con quien además lo une el afecto por su familia, y lo sintió con Nicolás Otamendi, hoy un auténtico emblema de la Selección Argentina campeona del mundo en Qatar.

Velentín Gómez, una garantía en la defensa de Vélez.

“De Nico también estuve muy encima. Siempre me pareció más parecido a mí, porque Valentín tiene una salida más linda, más clara, pero es un kamikaze, como también era yo. Los dos tienen esa característica de jugarse la vida con la que también me siento representado. Valentín tiene el futuro por delante. Nico es una alegría lo que ha logrado, la carrera que tuvo y tiene” , reflexionó el campeón de Copa Libertadores e Intercontinental en 1994.

Los créditos de Valentín Gómez a Cohio Almandoz

Al momento de firmar su primer contrato, en 2021, el propio Valentín Gómez se encargó de destacar lo importante que fue Héctor Almandoz para su llegada a Vélez. “El Cohio es amigo de mi viejo y yo lo conozco desde que nací. Siempre me insistía. Era todo muy nuevo porque jugaba en una Escuelita de San Miguel que se llama La Fábrica, nunca había jugado ni siquiera en FAFI y encontrarme con todo lo que es esta Institución…bueno, nada fácil”, le había dicho el defensor a la prensa oficial del club.