Si algo había que sumar como negativo en el contexto que atraviesa a Leo Messi en París Saint-Germain era que forme parte del parte médico debido a un cuadro gripal. Luego de la eliminación en los octavos de final de la Champions League contra el Real Madrid y el consecuente recibimiento en el Parc des Princes a puro silbido y abucheo a su nombre, se dio a conocer que el mejor jugador del mundo no estuvo presente en las últimas dos prácticas con el plantel y se supo el porqué.

Según informó el propio club parisino, el rosarino de 34 años “lleva 48 horas en tratamiento por un síndrome gripal”, lo que lo marginó de los entrenamientos y lógicamente su presencia en el duelo ante Mónaco de este domingo a las 9 de la mañana en Argentina no se dará, ya que fue desafectado de la lista de convocados.

Esto, claro está, retumbó en el predio de Ezeiza y en el cuerpo técnico de Lionel Scaloni, ya que apenas terminado este fin de semana, los jugadores del Seleccionado Argentino deberán sumarse a los entrenamientos de la Albiceleste de cara a la última doble fecha de Eliminatorias, donde se jugarán los partidos ante Venezuela y Ecuador y allí Argentina ya cuenta con una extensa lista de bajas por sanción o por lesión. Y luego de este parte médico del capitán de la Scaloneta, se planteó la duda de si podrá estar presente o será la baja más sensible de todas.

A priori, por lo que indica su condición de salud, Messi podría viajar sin problemas rumbo a nuestro país y estar presente, pero con los problemas circundantes en el PSG y el historial reciente de generar problemáticas por la cesión de los jugadores argentinos, no se descarta alguna represalia por la salida de Leo en este momento de la temporada, por más que el fútbol en Europa también se parará por la definición de las eliminatorias de la UEFA para Qatar 2022.

También está la cuestión de no recuperarse a tiempo por algún revés en este cuadro gripal, algo que parecería improbable. Aún así, Scaloni y compañía en la Selección Argentina deberán estar atentos a la situación de Messi, por más que seguramente pueda decir presente en La Bombonera y en Guayaquil ante Venezuela y Ecuador. No sería más que un susto.