En una noche para la historia azul y oro, los juveniles de Boca lograron un empate sin goles ante Banfield por la segunda fecha de la Liga Profesional y los hinchas se rompieron las manos aplaudiendo a los pibes del club. Entre calambres y elogios, el cierre del encuentro fue lo más emocionante del partido.

En presencia de Juan Román Riquelme, los jóvenes de las inferiores del Xeneize dieron la cara por el club y se presentaron a jugar en el Florencio Sola. El equipo dirigido por Sebastián Battaglia hizo un papel más que digno y hasta tuvo oportunidades para abrir el marcador, pero el duelo finalizó con un 0-0 que se festejó y mucho en Brandsen 805.

Así explotó el banco de suplentes de Boca: