El pasado 6 de mayo, Brian Fernández era presentado como nuevo refuerzo de Talleres de Remedios de Escalada para disputar la Primera Nacional. Sin embargo, casi tres meses después, su nombre preocupó a todo el Albirrojo ante lo que parecía ser un nuevo capítulo de indisciplina en su carrera: desde el club adjudicaban desconocer su paradero por semanas.
En lo que compone su ciclo, el delantero de 30 años alcanzó a disputar tan solo cuatro partidos y convirtió un gol. Su último encuentro fue el 14 de junio, cuando cayó 1-0 frente a Central Norte de Salta. En aquel partido sufrió una lesión que lo marginaría de las canchas por dos semanas.
No obstante, tras ser notificado, habría comenzado a ausentarse en los entrenamientos sin previo aviso, hasta supuestamente alcanzar los treinta días sin notificarle a Talleres acerca de su ubicación. Sin embargo, tan solo algunas horas después de que la situación tome una alta repercusión, el propio delantero sorprendió en redes sociales con un fuerte descargo.
Brian Fernández causó preocupación por ausentarse a los entrenamientos de Talleres (RE).
La publicación de Brian Fernández para desmentir su desaparición
“No estoy desaparecido. Estoy bien y con mi familia“, abrió Fernández, calmando las aguas. Bajo ese contexto, salió al cruce y sentenció: “Me genera molestia tener que salir a aclarar cosas que no ‘investigan’ antes de publicar su informe. Hablé con la gente del club y ellos también hablaron con mi familia“.
Y dejó en claro que la razón de sus faltazos no está ligada a una posible recaída o cuestiones de salud. “Gracias por la gente que se preocupa, pero esta vez no es el caso de lo que todos piensan. Que no esté publicando mi día a día no quiere decir que estoy ‘desaparecido’, la vida va más allá de una red social“, cerró Fernández, sepultando cualquier insinuación acerca su carrera y vida privada.
Los antecedentes a los que se refirió indirectamente Brian Fernández
A lo largo de su carrera, el delantero se vio implicado en recaídas en adicciones y cuestiones perjudiciales a su salud. Venía de disputar todo el 2024 con Almirante Brown, con un historial de 24 partidos y cinco goles. Su arribo al conjunto de de Casanova se dio luego de que en Colón de Santa Fe, club del cual es hincha, protagonizara un delicado episodio.
En marzo de 2023 se encontró su auto vandalizado y abandonado al norte de Santa Fe. Tras varias horas de intensa búsqueda, fue hallado en la casa de un familiar, aunque nunca se esclareció definitivamente el trasfondo de aquella secuencia. “No soy psicólogo, la prioridad es el grupo. Ya está. Para mí, es un tema concluido“, declaró al respecto su entrenador de aquel entonces, Pipo Gorosito, luego de que en el Sabalera optaran por marginarlo.
El año anterior, 2022, luego de jugar seis partidos en Deportivo Madryn, empezó a faltar a las prácticas sin previo aviso. Luego pasó por Ferro, pero en Caballito tuvo el mismo fin de ciclo.
El primer episodio dificultoso para su carrera ocurrió en 2016, cuando dio positivo en un controlantidoping en Racing y fue sancionado por 18 meses. Tras superar la pena, con fugaces pasos por Sarmiento y México, recaló en Portland Timbers de MLS. Su estadía en Estados Unidos duró un semestre: le rescindieron contrato mientras formaba parte de un programa especial contra las adicciones.
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