Charles Aránguiz alzó la voz. El volante de Universidad de Chile habló por primera vez en extenso frente a los micrófonos y aprovechó de enviar un claro mensaje sobre Eduardo Vargas.
¿Cuál? El Príncipe no ocultó que esperaba encontrárselo de vuelta en el club. Y es que al recordar el plantel de 2011, la emoción recorrió su mente. Por eso, quería retornar a la institución y juntarse con sus viejos conocidos.
“El 2011 se formó un grupo muy lindo, muy de piel. Había una amistad, un respeto muy bueno. El grupo se mataba entrenando y después era todo risas, era muy familiar”, comenzó explicando a la prensa del club.
En dicha línea, expresó: “No es coincidencia que nos fue bien. Entonces, llego aquí y me encuentro con un grupo bien parecido. Gente joven, respetuosa, gente grande que llega y se mata día a día”.
Tras ello, la alusión a Turboman. No escondió que deseaba volver a compartir cancha con uno de sus socios favoritos.
“Si algún día tenía la oportunidad de volver a la U, esperaba encontrarme con Marcelo (Díaz), que era la gente que estaba jugando en ese momento. No sé, un Osvaldo González que todavía está jugando… eh, Vargas”, confesó.
“Bueno, se dio la oportunidad que solo estaba Marcelo. Las cosas pasan por algo, van pasando cosas también en el tiempo. Me hubiese gustado que estuvieran esas personas que te nombré, pero por equis motivo no están”, agregó.
Su retorno a Universidad de Chile
Finalmente, aplaudió su reencuentro con Marcelo Díaz. A pesar de que todavía no cuenta con Eduardo Vargas a su lado, está contento por seguir en el mediocampo con otro de sus grandes amigos.
“Con Marcelo tenemos una amistad y futbolísticamente debe ser con el único que me conozco de esa forma. Es automática, no necesitamos hablar ni mirarnos dentro de la cancha”, comentó.
“Debe ser el único jugador con el que tenemos esa conexión, por suerte nos encontramos ahora. Ya estamos maduros, en otra etapa de la vida. Si agregamos toda la experiencia que tenemos, se hace más fácil”, cerró.