Además de lo que significó deportivamente hablando, el título del Apertura 2019 de la Liga MX que Monterrey le ganó a América en el Estadio Azteca también tuvo muchos condimentos emocionales.

La historia que se llevó la mayoría de la atención fue la de Antonio Mohamed, quien cumplió con la parte de la promesa que le había hecho a su hijo difunto en 2006: ser campeón con Rayados.

Sin embargo, el auxiliar técnico del Turco también revolvió la sensibilidad de los seguidores de La Pandilla. En medio de los festejos, tuvo una dedicatoria especial para su hermano fallecido.

A Aldo de Nigris se lo pudo ver en el césped del Coloso de Santa Úrsula con una imagen de su hermano Toño, quien perdió la vida en 2009 por un paro cardíaco sufrido en Grecia.

Entre Farid y Antonio, la afición de Monterrey que alienta desde el cielo está de fiesta por la quinta.