Stephen Eustáquio había llegado como un proyecto al Cruz Azul. El entrenador Pedro Caixinha había confiado en un futbolista desconocido para el público mexicano para realizar una dura tarea: reemplazar a Iván Marcone, quien ya se había marchado a Boca.

Sin embargo, el futbolista canadiense nacionalizado portugués sufrió una rotura de ligamento anterior y una lesión de menisco en la rodilla izquierda en febrero, por lo que se estima que todavía le quedan cerca de seis meses de recuperación.

Hoy, en Instagram, el mediocampista mostró que, a pesar de tener que transitar un largo camino para volver a estar en condiciones de jugar dentro de un campo, no la está pasando tan mal.

Eustáquio subió dos fotos en una pileta de Acapulco, Guerrero, junto a su novia y un paisaje envidiable.

¡Desde aquí le mandamos fuerzas al futbolista del Cruz Azul, aunque no sabemos cuánto las necesitará en este momento!