El enfrentamiento armado entre Estados Unidos e Irán tuvo una escalada en los últimos días tras la muerte del general iraní Qassem Soleimani y generó incertidumbre internacional por un posible conflicto bélico en la región. Tal es así que la FIFA ya tomó nota del asunto y, según la columna del periodista Javier Tejado en el Diario El Universal, maneja la posiblidad de cambiar la sede y hacer el Mundial 2022 en México, Estados Unidos y Canadá.

La elección de Qatar tuvo dificultades desde el comienzo: en 2014 surgieron denuncias de posibles sobornos a directivos de la FIFA para darle la sede mundialista al país árabe. Tras las acusaciones y el FIFA Gate, dos promotores del Mundial en Qatar como Michel Platini y Joseph Blatter tuvieron que dejar sus cargos. 

Estos problemas se suman al bloqueo aéreo, naval y terrestre que le impusieron a la nación de la península sus países vecinos Emiratos Árabes, Barhéin, Egipto, Mauritania, Senegal, Islas Comoras, Jordania y Libia por acusarla de financiar el terrorismo junto a Irán. Es tan grande el boicot que, por ejemplo, ni siquiera se pueden lucir playeras con la publicidad de Qatar Airways en los países antes mencionados. 

Según la nota de El Universal, FIFA ya se comunicó con Robert Kraft, Presidente del Comité Organizador del Mundial 2026, para plantearle la posibilidad real de adelantar el máximo torneo del futbol cuatro años. Desde la organización respondieron que están dispuestos.

Los estadios mexicanos para la gran cita están practicamente listos. Tanto el BBVA de Monterrey, como el Akron de Chivas y el Estadio Azteca sólo necesitan retoques para albergar al Mundial. 

Una vez más, el futbol se ve en medio de problemas de la politica internacional. De ella dependerá si la Copa del Mundo volverá a México en 2022 o 2026.