Ni el más negativo de los seguidores del América iba a imaginar este nivel de Guillermo Ochoa, que llegó para reemplazar a un genial Agustín Marchesín en la portería y jamás pudo resaltar.

Según informó hoy 'El Francotirador', al mal nivel del guardameta se le sumó una acalorada discusión con su entrenador, Miguel Herrera.

Y es que en el partido ante el Cruz Azul del último fin de semana, en el que se la pasó recogiendo el balón de su propio arco, Memo le recriminó al Piojo el cambio en la banda izquierda. La entrada de Carlos Vargas por Jorge Sánchez fue fundamental en el resultado final.

Tal discusión, que se agrega a todos los malos partidos que viene teniendo desde su llegada al Nido, podría finalizar con el jugador en la banca.

Recordemos que luego de que Marchesín sea vendido al Porto y antes de que Ochoa arribe al club, Óscar Jiménez había mostrado un alto rendimiento.