Hay fichajes que pueden cambiar por completo la historia de una institución. Para eso son clave los visores, quienes se encargan de descubrir a las futuras estrellas mundiales antes de que exploten y peguen el gran salto a los clubes más grandes de Europa, cuando ya se hace completamente imposible fijarse en ellos siendo un equipo de las ligas chicas.
Esto le sucedió a Tigres UANL hace un tiempo e, insólitamente, estuvieron a nada de fichar a un crack de una talla enorme. Los Felinos se interesaron mucho en un joven que brillaba en Gremio de Porto Alegre en enero de 2010, pero apareció un club europeo y se lo arrebató de las manos.

Se trata de Douglas Costa, el extremo brasilero que en aquel momento tenía 19 años. Daniel Guzmán,extécnico de los Regios, confesó en entrevista paraRG690: “Íbamos por Douglas Costa, ya lo teníamos amarrado pero rápidamente llegó al Shakhtar de Ucrania y se lo llevó, pero cuando hay presupuesto, puedes armar un equipo fuerte, serio”.
“Después de haber perdido a Douglas Costa, que tenía más cartel, necesitaba alguien por izquierda, un zurdo. Como no se pudo trajimos a Éverton Cardoso. Venía chico, era un gran jugador, pero no se pudo adaptar, le costó”, recordó el Travieso.
Douglas ganó absolutamente todo lo que jugó en Shakhtar Donetsk y se terminó de formar. Allí fichó por el Bayern Munich a cambio de unos 30 millones de euros, donde brilló y logró que la Juventus se fije en él. Hoy, completa una delantera temible con Cristiano Ronaldo, Paulo Dybala y Gonzalo Higuaín.





