Hace diez años el ambiente futbolístico se detenía por el atentado que sufría Salvador Cabañas en un bar de la Ciudad de México que lo llevó a abandonar el futbol.
El exdelantero de América recibió un disparoen la cabeza con un arma calibre 25 por parte de José Jorge Balderas Garza, alias JJ, un supuesto empresario de transporte que lo atacó en el baño del establecimiento Bar Bar.
Según el actual senador Miguel Ángel Mancera, que habló con Medio Tiempo, se hizo cargo de una investigación que se volvió compleja por dos razones.
La primera porque el gobierno de Paraguay presionaba para que se arreste a Balderas Garza inmediatamente, mientras que al avanzar la investigación se supo que la empresa del agresor era una fachada ya que él tenía un vínculo con el Cártel de los Hermanos Beltrán.
El Chava Cabañas, que se preparaba para jugar la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010 con Paraguay, estuvo con seguridad las 24 horas del día por miedo a una represaría de Balderas Garza, quien recibió 20 años de presión.
“Siempre los gobiernos extranjeros te exigen que haya justicia”, dijo Mancera a Medio Tiempo en relación a la presión que tuvo por parte del gobierno paraguayo.
Actualmente, Salvador Cabañas vive en México y ayuda en algunos entrenamientos al cuerpo técnico del club Cafetaleros de Chiapas, equipo de la segunda división.
