La mañana estuvo protagonizada por la incertidumbre. La dirigencia y el cuerpo técnico de Binacional no se ponían de acuerdo dónde comenzar jugando la final del fútbol peruano. 

Todo esto se hizo público. De hecho, el mismo Roberto Mosquera condicionó su continuidad a la decisión final. Llegó, entonces, el tiempo límite y la tensión aumentó.

A horas de la tarde, sin embargo, se llegó a una solución. Y es que se confirmó que el primer partido de la final será este domingo 8 de diciembre en Juliaca como lo quería el DT y los jugadores. 

"Hemos llegado a un acuerdo con el presidente jugar primero en Juliaca que es lo que le conviene al equipo", señaló Roberto Mosquera. "Los jugadores ya han sido avisados", confirmó luego. 

"Quiero expresarle mis disculpas al presidente por salir a hablar en la mañana de un tema interno", lamentó Mou. "Desde que hemos llegado acá, el presidente ha buscado condiciones mejores de trabajo", aseguró luego. 

Así, todo parece solucionado en el Poderoso del Sur. El conflicto de todas maneras se hizo público y abrió algunas heridas. Ya se verá si en el partido estas pueden cerrarse o volver a abrirse.