El sueño que inunda a una parte del estado de Sao Paulo se puede cumplir este sábado 20 de noviembre. Bragantino está a 90 minutos de cumplir su sueño en realidad, en medio de una fascinante historia que tiene como protagonista a la marca de bebida energizante Red Bull. ¿Cómo pasó este humilde equipo de la Segunda División de Brasil a ser protagonista de la final de la Copa Sudamericana gracias a esta empresa?

En sólo dos años, Red Bull ha cambiado la historia del Bragantino, un humilde club del interior de Sao Paulo. Fue en marzo de 2019 cuando se anunció la venta del club a la empresa de bebida energizante en una operación de poco menos de 11 millones de dólares. De esta manera, se sumó a otros equipos como Leipzig, Salzburg y New York que ya estaban bajo su dominio.

 

Anteriormente, los caminos de ambas partes estaban separados. El Clube Atlético Bragantino estaba inmerso en la Segunda División de Brasil, cuando tiempo atrás llegó a estar incluso en Tercera División. Su mejor momento fue a inicios de los 90 cuando llegó a la final del Campeonato de Primera División en 1991. Ese equipo comandado por Carlos Alberto Parreira (quien fue luego campeón del mundo con la selección brasileña en 1994), que tenía como figura a un joven Mauro Silva, no pudo ante uno de los mejores Sao Paulo de la historia, que luego ganó las Copas Libertadores 1992 y 1993.

En tanto Red Bull estaba concentrado en otro proyecto brasileño que había creado en 2007: RB Brasil, club que llegó a estar en el Campeonato Paulista, pero que seguía en la cuarta división del país. Ante las pérdidas que significaba este proyecto y sin la chance de llegar a la élite, encontró la fórmula del éxito con la compra del Bragantino. 

El crecimiento fugaz de RB Bragantino

"Buscábamos un equipo con historia y con una fuerte conexión con la ciudad. Encontramos eso y más en el Bragantino", contó el CEO de RB Bragantino, Thiago Scuro, tiempo atrás. Y se implantó rápidamente un objetivo ambicioso. “En tres años veo al Red Bull Bragantino luchando entre los cuatro primeros del Brasileirão (...) Y en cinco años veo suficiente tiempo para los títulos”, deseó. No habló en vano.

Pues no perdió tiempo. Compitió bajo el dominio de la empresa austríaca de bebidas en la Serie B del Brasileirao. Debido a que no hubo tiempo para cambiar el nombre y el escudo durante la competición, siguió jugando como el Clube Atlético Bragantino y con su mismo escudo. Así fue que conquistó el título, el primero en 22 años. Así, para 2020, apareció el Red Bull Bragantino.

No fue una gran ciencia lo que hizo Red Bull con Bragantino. Invirtió fuerte en jugadores, pero también lo hizo en un entrenador joven que pudiera llevar adelante al primer equipo. Así, para esta Copa Sudamericana, llegó Mauricio Barbieri, quien ya venía de un buen trabajo en Flamengo durante 2018. Tras Antonio Carlos Zago, quien fue el que lo sacó campeón en la Serie B, y tras Felipe Conceiçao, Barbieri fue el que dio en el blanco con el rendimiento y eso lo trajo a la final de la Copa Sudamericana.

Pero además del técnico, la política de Red Bull con el equipo también hizo su parte. Siguió el modelo del RB Leipzig, que permitió esa inversión en futbolistas jóvenes y que pudieran despegar rápido. Actualmente, RB Bragantino posee la plantilla más joven de Brasil con un promedio de 23.9 años de edad, según datos de Big Data Sports, en base a informes de CIES, y esto permitirá ventas importantes a futuro. De hecho, la primera fue la de Claudinho durante el último mercado de verano europeo. Su salida por 17 millones de dólares al Zenit, equiparó el presupuesto utilizado durante toda la temporada anterior, y le dio un gran alivio a lo que vendría después. Figuras como Artur y Léo Ortíz serían los próximos en salir y en darle nuevas ganancias al equipo.

El modelo Red Bull goza de un gran renacer gracias a Bragantino y su premio más grande se podría dar este sábado con la obtención de la Copa Sudamericana. No la tendrá fácil ante un Athletico Paranaense, que también tiene un modelo exitoso y que le ha permitido pelear por copas internacionales en el último tiempo.