Sin dudas, para el hincha de la Selección Argentina, los días más fáciles de las últimas décadas fueron esas jornadas de Brasil 2014 antes de la final en el Maracaná contra Alemania. Principalmente, después de ganarle a Bélgica y romper la barrera de cuartos de final que desde 2006 no se lograba superar hasta el fatídico gol al segundo palo en el alargue. Si a alguno de ellos le preguntasen cómo se imaginaría el cielo, seguramente lo rellenase con memorias de ese junio y julio.
Federico Fernández fue una de las debilidades de Alejandro Sabella, quien lo llevó al conjunto nacional, le dio continuidad y lo llevo a la Copa del Mundo de Brasil. Con el pasar de los partidos fue perdiendo lugar, pero aquel mes fue uno de los mejores en toda su carrera profesional, que lo hoy lo encuentra en el Newcastle con 31 años de edad y recordando aquel Mundial con la Selección.
En una entrevista con Estudiantes Play, el sitio de streaming de Estudiantes de La Plata, el defensor central habló sobre la figura de Pachorra, que años antes de agarrar al conjunto nacional tuvo su consagración con la Copa Libertadores de 2009. Él lo tuvo tanto en el Pincha, donde debutó como profesional en el 2008 y ganó dos títulos, donde además del continental se la sumó el de Primera División del 2010.
"Alejandro tuvo una ventaja tanto en Estudiantes como en la Selección: él ya sabía adónde iba. Toda su experiencia, la edad, sus formas, sus valores, lo hizo un distinto a la hora de transmitirte algo", contó Fernández sobre Sabella, quien fue el primer entrenador en mantenerse varias años desde José Pekerman, a quien le sucedieron Alfio Basile, Diego Maradona y el Checho Batista.
"Siempre en la charla a la último había un mensaje, algo. Había emoción, vivencia propia suya. En algunas charlas terminaba llorando, salía emocionado. Se te caían las lágrimas", recordó el defensor central que fue subcampeón en Brasil 2014, pero después perdió lugar en la Selección Argentina hasta el día de hoy.
