Carlos Tevez no la ha pasado bien durante sus últimos meses en Boca. Incluso se llegó a suponer, llegando al final de 2019, que podía no solo despedirse del club sino de la práctica del fútbol profesional.

Pero dicen que donde hubo amor, sobre todo a un ídolo, cenizas quedan. El Apache tuvo la oportunidad de reunirse con Juan Román Riquelme, flamante intgrante de la nueva comisión directiva Xeneize, y también con el entrenador Miguel Ángel Russo, quien le manifestó que cuenta con él.

Entonces, El Apache recuperó las fuerzas y la confianza necesarias para volver a intentarlo y se abocó de lleno a la pretemporada previa a la reanudación de la Superliga y al inicio de una nueva edición de la Copa Libertadores.

En San Juan, provincia a la que Boca llegó para disputar un amistoso ante Universitario de Deportes de Perú, Carlos Tevez recibió otro de esos mimos al alma que lo fortalecen.

Fue en un instante que hizo feliz a una pequeña hincha del Xeneize que se acercó a recibir su firma, su abrazo y la foto, para la que no podía dejar de llorar por la emoción. Pero esa niña también hizo feliz al Apache; porque más allá de algunas críticas de ocasión recibió otra prueba de que el club de sus amores todavía lo ama a él también.

¡Y a volver a intentarlo, crack!