De forma imprevista, cuando todo era calma y tranquilidad en la institución de Liniers, en Vélez se encendió una gran alarma esporádicamente.
Thiago Almada, una de las jóvenes promesas del club, no lograba ponerse de acuerdo con la directiva del club para renovar así el vínculo que une a ambas partes.
El volante, que en su momento había sido tanteado y seguido de cerca por el Manchester City, comenzó a ser rastreado por nada más ni nada menos que Boca, club que vio en puerta una fantástica opción para reforzar su primer equipo.
Lo cierto es que, luego de unas intensivas charlas entabladas,el cuadro comandado técnicamente por Gabriel Heinze supo esquivar una vez más la bala y llegó a un principio de acuerdo con Almada para extender el plazo de su contrato.
Mientras tanto, desde el elenco de La Ribera, se optó por redireccionar la lupa y comenzar a seguir las pasos y el nivel de otra de las joyas con las que cuenta la Superliga Argentina: Maximiliano Lovera.
El mediocampista, de apenas 20 años, es una de las principales caras que Rosario Central tiene entre los integrantes del primer equipo profesional.
Cabe destacar que Boca estaría buscando sacarle el máximo provecho a la crisis que el Canalla atraviesa. Por otra parte, la institución de Santa Fe, que estaría dispuesta a vender a su joya, entablaría próximamente conversaciones con sus pares de Buenos Aires para encaminar las tratativas por buen camino.