Un día como hoy pero de 2012, Millonarios rompía una racha de 24 años de sequía de títulos nacionales, de malas manejos administrativos, malas inversiones y volvía a poner su nombre en lo más alto.

Su último título había sido en 1988 y hasta 2012, no sabían lo que era levantar una copa por liga, pues en 2011 había sido campeón pero de la Copa Colombia. Un año más tarde, en el segundo semestre del 2012, pondría a celebrar a todos los Azules.

De la mano de Hernán Torres, Mayer Candelo, Rafael Robayo, Román Torres, Luis Delgado, Pedro Franco, Lewis Ochoa, Harold Martínez, Jhonny Ramírez, Juan ‘Ganiza’ Ortiz y compañía, Millonarios llegó a la gran final del fútbol profesional colombiano, en donde se enfrentaría con el Deportivo Independiente Medellín.

Tras el empate sin goles en el partido de ida en la ciudad de Medellín, todo se definía en El Campín de Bogotá. La hinchada Azul armaría la fiesta y el equipo daría los motivos para celebrar. El marcador se abriría sobre los 41 minutos de juego, cuando Wilberto Cosme pondría el uno por cero a favor del Embajador.

A los seis minutos del segundo tiempo de juego, Medellín empataría el partido por medio de Willian Zapata, quien aprovecho un rebote que dejó Luis Delgado; el que se convertiría en el héroe de la noche en la tanda de penales.

Por parte de Millonarios, Wason Rentería, Pedro Franco y ‘Ganiza’ Ortiz marcaron sus cobros, mientras que Diego Herner erró el penal que pondría en venta al Azul, pero Omar Vásques fallaría el cuarto cobro y llenaría de nerviosismo a la hinchada Azul.

Después todo se definía a muerte, quien fallara perdería la final. Luis Delgado fue el encargado de convertir el sexto cobro y luego se paró bajo los tres palos, Andrés Correa patearía pero ‘Lucho’ Delgado lo atajaría para darle la estrella 14 a Millonarios.

Hoy se festejan ocho años de aquella noche de diciembre en donde Bogotá se vistió de Azul y todos los seguidores de Millonarios se desahogaban en un grito de campeón. Muchas generaciones de fanáticos Azules veían por primera vez campeón a su equipo.