Cuando Ascues y Deza llegaron a Alianza Lima hubo ilusión y miedo. La ilusión fue por su calidad técnica; el miedo, por sus costumbres y antecedentes.
Estos jugadores tenían la fama de gustarle la noche y el alcohol. Igual, como buenos hinchas, los recibieron con todo el entusiasmo en la presentación del equipo, a pesar que ya los habían ampayado una vez.
En esta semana, volvieron a caer, ahora en una discoteca. Las reacciones ahora no fueron tan positivas. Se especuló que los echarían, que los castigarían y el propio Bengoechea dijo que se sacaban solos.
Victor Hugo Marulanda también habló al respecto: "Hay temas que uno los maneja al interior del club, en esto he sido muy claro en el camerino, incluso con el mismo Pablo (Bengoechea) y jugadores". "Hay temas disciplinarios en el club que están normados y nosotros tratamos de cumplir con eso", continuó.
"Acá hay un tema con la disciplina del grupo y la misma se hace al interior del club", insistió en el tema de la sanción. "No me parece a mí, que se haga público (por el castigo). Nosotros tenemos un reglamento para felicitar o sancionar y se maneja de manera privada", agregó.
"Hay una imagen de Alianza y nosotros estamos en la obligación de proteger la marca para los mismos jugadores", señaló para finalizar. "Queremos que se hable de fútbol, pero lamentablemente se tienen que tocar estos temas", concluyó.
