Desde la partida de Usain Bolt, el mejor velocista de todos los tiempos, el mundo del atletismo quedó huérfano de su megaestrella. Y ese espacio, con menor espacio mediático, lo tomó el keniata Eliud Kipchoge, el mejor maratonista de todos los tiempos. Ganador nato, se quedó con 15 de las 17 carreras de 42,195km que inició, con récord del mundo incluido (Berlín 2018, con 2h01m39s). en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Kipchoge se alzó con su segunda medalla en maratón para sumar así su cuarta presea olímpica, después de la plata en Pekín 2008 y el bronce en Atenas 2004 (ambas en los 5000 metros). “Todavía tengo el fuego en mi estómago, por eso estoy deseando que llegue París 2024”, dijo Kipchoge, de 37 años (nació 5 de noviembre de 1984 en el distrito de Distrito Nandi, Kenia). Y agregó: “Mi principal motivación es inspirar a todo el mundo y la siguiente es el amor por el deporte. Cuando digo que la inspiración para todo el mundo es que todavía necesito la próxima generación. Confío en que para el año 2024 habré hecho del mundo un mundo en movimiento".

Kipchoge, uno de los embajadores rumbo a París 2024, en Tokio 2020 logró sumarse al etíope Abebe Bikila (1960 y 1964) y al alemán Waldemar Cierpinski (1976 y 1980) como los únicos corredores en ganar medallas de oro consecutivas en los Juegos Olímpicos.

"Correré una carrera en primavera, pero debido a las circunstancias (pandémicas) que rodean a todo el mundo, aún no se ha anunciado dónde correré", contó. Y añadió: “Todavía quiero correr, quiero ser el primer humano en correr y (ganar) tres Juegos Olímpicos consecutivos. Estoy emocionado de seguir rompiendo barreras (tal como hizo con INEOS 1.59 cuando, en Viena, corrió la distancia del maratón en 1h59m40s). El plan es seguir utilizando las mentes más brillantes en los deportes para poder superar los límites que impone el atletismo”.

Kipchoge llegará a París 2024 con 39 años. Esto implica que queda por pasar mucha agua bajo el puente. El propio Kipchoge lo sabe y así lo entiende. Ta vez por eso no se conforma, al tiempo que busca mantenerse en la elite mundial, sitial al que accedió en 2003 cuando fue campeón mundial de 5.000 en París por delante de Kenenisa Bekele y de Hicham El Guerrouj. Kipchoge, el hombre que en 2003 era un joven que trataba de conocer lo que pasaba en el mundo. El mismo que ahora, un tanto mayor, sigue en fase de aprendizaje.