Manchester City se fue al vestuario en el entretiempo venciendo 2 a 0 a Shakhtar Donetsk en la Champions League.

El segundo tanto fue de penal después que el árbitro le regale un insólito tiro desde los 12 pasos al elenco de Pep Guardiola.

¿Qué pasó? Raheem Sterling se metió en el área, le pegó al pasto y el árbitro cobró penal. ¡Increíble!. 

Claro, nadie fue honesto, el juez no volvió sobre sus pasos y el visitante sufrió una injusticia total.