Citaremos a un conocido relator colombiano, que ustedes distinguen, para describir lo que sucedió en el partido de este domingo entre Galatasaray y Besiktas: fue un encuentro mágico porque no hubo nada por aquí ni nada por allá.

Los que tuvieron la iniciativa fueron los locales y aunque pocas jugadas le hicieron llegar a Radamel Falcao, el delantero colombiano se las ingenió para generar dos oportunidades de gol que no se concretaron por centímetros.

La primera oportunidad fue tras un tiro libre. ‘El Tigre’ se hizo el espacio entre dos jugadores del Besiktas y metió un frentazo que pasó cerca, muy cerca, del palo derecho del arco que defendió Loris Karius.

Falcao, quien estuvo participativo durante el encuentro, tuvo su segunda oportunidad de anotar, esta no tan clara, luego de recibir la pelota por el costado derecho, enganchar para la pierna izquierda y quedar con panorama para disparar.  

 

Radamel remató y: ¡uyyy! Bueno, digamos la verdad. El remate no pasó tan cerca, pero con las ganas que teníamos de gritar un gol en este fin de semana sin fútbol nos dejamos llevar de la emoción.