La euforia por el triunfo en Granada se ha convertido rápidamente en una alerta amarilla. Tras conseguir poder pelear como mínimo por una jornada más con Atlético, Real Madrid ha despertado con la peor de las noticias de cara a visitar a Athletic de Bilbao el próximo domingo. Y es que Toni Kroos ha tenido que ser aislado producto de un contacto directo con un positivo por coronavirus. Más problemas para Zidane.

Si ya era complicado armar un once sin Carvajal, Varane, Ramos, Mendy y Lucas Vázquez para el próximo encuentro, la hipotética baja de Kroos terminaría de romper los planes de Zidane. El francés dio descanso al internacional alemán anoche pensando en utilizarle durante los 90 minutos de la batalla de San Mames. Si bien no ha dado positivo en las últimas pruebas, su presencia ante los vascos peligra.

 

El comunicado del club

“El Real Madrid C. F. comunica que nuestro jugador Toni Kroos se encuentra en aislamiento al haber estado en contacto directo con una persona que ha dado positivo en COVID-19, aunque todos los test que se le han realizado al jugador han resultado negativos”, se pronunciaban desde las redes sociales del equipo Merengue.

El alemán no hizo parte del entrenamiento de esta mañana y en Valdebebas temen por que su caso se parezca al de Federico Valverde. Recordemos que el uruguayo sufrió una situación parecida a la del número 8 pero no dio positivo hasta 5 días más tarde.

La nueva baja que podría tener Zidane en este final de Liga complica aún más cosas para un Real Madrid que está al límite en lo físico. Jugadores como Modric, Casemiro, Kroos o Benzema han sufrido un curso donde las 50 lesiones musculares del plantel han impedido que pueda haber un reparto inteligente de los minutos. Sin el alemán, el riesgo de un desgarro para la última fecha será aún más grande para sus compañeros.