El CEO de Activision Blizzard, Bobby Kotick, se encontró en el centro de la controversia en estos últimos días luego de que se descubriera, a través de un reporte de Wall Street Journal, que estaba al tanto del abuso y discriminación en su compañía. Tras estas revelaciones, los jefes de Xbox y PlayStation lo criticaron.
El primero de ellos fue Jim Ryan, jefe de la división de juegos de Sony, que escribió en un correo interno a sus empleados que estaba “desanimado y francamente pasmado al leer que Activision no ha hecho lo suficiente para arreglar una cultura arraigada de discriminación y abuso”.
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Continuó diciendo que se acercó a Activision luego de la publicación del artículo para “expresar su preocupación” y preguntarles cómo contestarían. “No creemos que su respuesta o sus comunicados aborden debidamente la situación”.
El jefe de Xbox, Phil Spencer, fue un paso más allá. Además de expresar su preocupación, dijo que Xbox está “evaluando todos los aspectos de su relación con Activision Blizzard y haciendo ajustes proactivos”.
Ambas compañías son de las más grandes en la industria del gaming y han tenido una relación con Activision durante años, por lo que esto podría afectar gravemente a la compañía. Todo indica que Bobby Kotick abandonará su puesto pronto, ya que su presencia está dañando la reputación y viabilidad de la empresa.
