Fernando Gago volvió a sufrir un duro tropezón con Boca Juniors. Este domingo 27 de abril, el entrenador que abandonó al Rebaño de manera polémica en octubre del año pasado fue uno de los grandes apuntados por los aficionados xeneizes tras perder por 2-1 ante River Plate en el Superclásico argentino que se llevó a cabo en el Estadio Monumental de Buenos Aires por el Torneo Apertura 2025.
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Pocos minutos después de finalizado el encuentro, una gran cantidad de simpatizantes auriazules se volcaron a las redes sociales para expresar su descontento con el entrenador. Al respecto, muchos hicieron hincapié en el esquema táctico presentado por el estratega, quien inició el partido con una línea de cinco defensas a diferencia de lo que había presentado en los anteriores encuentros.
Así, se pudieron leer mensajes como “el primer tiempo se los regalaste a ellos de principio a fin, muchos defensores para que en todos los centros cabeceen”, “se tiene que ir ya”, “tiene aura perdedora”, “échenlo por favor” y otros comentarios con durísimos epítetos e insultos para el DT de 39 años.
Claro que Gago no fue el único en sufrir los embates de la parcialidad de Boca Juniors, la cual también se desquitó contra su directiva, encabezada por el ex futbolista y leyenda del club Juan Román Riquelme como presidente, y algunos jugadores.
Los números de Fernando Gago en Boca Juniors
Ya son más de seis meses los de Fernando Gago al frente del combinado sudamericano. Y si bien sus números no muestran un saldo negativo, ha sido criticado por caer en los duelos denominados como “decisivos”, entre los que se encuentran no solo el Superclásico de este domingo, sino también la inesperada eliminación en las fases previas de la Copa Libertadores 2025 contra Alianza Lima de Perú. Al cabo, el ex Chivas acumula 30 partidos dirigidos al frente de Boca Juniors con 18 victorias, 5 empates y 7 derrotas.
Fernando Gago lleva dirigidos 30 encuentros al frente de Boca Juniors. (Getty Images)
Vale recordar que el argentino se marchó al Rebaño tras, según el mismo reveló, pagar su propia cláusula de rescisión que estaba valuada en alrededor de 1.500.000 dólares. Esto naturalmente dejó una herida abierta en Guadalajara, la cual no parece haber cerrado aún.
