El pasado fin de semana, en Las Vegas, Alexa Grasso hizo historia convirtiéndose en la primera campeona mexicana de UFC, venciendo a Valentina Shevchenko por sumisión y adjudicándose el título en la división de peso mosca. En las últimas horas, se dio a conocer también la bolsa de dinero que cobró.

Si se tiene en cuenta la magnitud de la pelea, porque se enfrentó a quien está considerada como una de las mejores libra por libra de la actualidad, se hace más que evidente las grandes diferencias que existen en la disciplina entre hombres y mujeres en relación a los contratos que se ofrecen.

De acuerdo a cifras que revela el sitio UFC News, el monto que se llevó la mexicana, nacida en Guadalajara, sería de 86 mil dólares, es decir, alrededor de 1 millón 545 mil pesos mexicanos. Y si bien el pago no es para nada despreciable, no está ni cerca de lo que se paga en una pelea de campeonato masculino.

También debe notarse que Alexa Grasso no está incluída entre las peleadoras mejor pagadas de UFC, pues son varias las que pueden ganar hasta el doble en una pelea. Su nuevo status de campeona y el interés que pueda generar en un gran número de fanáticos mexicanos podría cambiar pronto esta situación.