Atlético de Madrid quedó eliminado del Mundial de Clubes 2025. En Pasadena, el conjunto de Diego Simeone derrotó a Botafogo por 1-0 con gol de Antoine Griezmann pero no le alcanzó, ya que necesitaba ganar por al menos tres goles producto de la victoria de PSG ante Seattle Sounders (2-0).

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Cabe destacar que en este juego hubo presencia mexicana, ya que el árbitro mexicano César Ramos fue el encargado de impartir justicia. Sin embargo, tal como le pasó en Benfica vs. Boca Juniors, volvió a estar en el ojo de la tormenta por su actuación en el primer tiempo que no fue del agrado del conjunto español. En concreto, por el lado del bando europeo se reclamaron dos penaltis no pitados por el silbante de 41 años.
Uno de ellos ocurrió promediando la primera mitad, cuando Julián Álvarez se internó en el área brasileña y cayó ante un presunto contacto de Jair, el cual no fue considerado por el culiacanense quien tampoco recibió un llamado del VAR para revisarlo.
No obstante, sobre el final de la etapa inicial sí fue citado para ver un posible nuevo penalti a favor de Atlético de Madrid por infracción de Gregore nuevamente sobre Julián Álvarez. Y si bien consideró que la falta que primeramente ignoró había existido, luego advirtió que previamente hubo otra infracción del delantero noruego Alexander Sorloth que invalidó todo lo que sucedió después.
Naturalmente, esto encendió la indignación de distintos elementos del conjunto español. Uno de los que hizo visible su descontento con el colegiado fue Giuliano Simeone, futbolista que se despachó con una dura crítica en el entretiempo.
“Nunca vi algo igual, creo que son dos penaltis. No nos están favoreciendo las decisiones, tenemos que jugar contra eso. Julián Álvarez me dice que lo pisan en el área”, manifestó el hijo del entrenador del combinado capitalino en diálogo con DAZN.





